Camino.

Tú ya lo conoces, ya sabes de qué trata.
Te despista para que te unas, y luego te saca.
Te da la espalda cuando deseas caminar en él.
Para poder conquistarle, sentir que eres más que él,
poder caminar ahí, debes tener ideas claras.
Debes dejar atrás los errores, buscar en ti,
buscar lo que está mal y cambiar el ritmo...
Y el camino sigue llamándote en forma de brisa
No hay sonido que interrumpir, ni momento
de claridad que interrumpir.
Todas las dudas se vuelven de cristal. ¡Cuidado!
Pueden romperse en cualquier momento.
El camino te cambia el color y te mezcla los senderos.
El camino se llama vida...
Pero vamos, busca en tu intuición, en tus presentimientos.
Busca en ti, el camino lo conoces. Ahora síguelo sin miedo.