martes, 6 de octubre de 2009

Viendo fantasmas por la noche.

Él es el tipo de hombre al que no le importa nada, ella el tipo de chica que te da mil señales pero no dice nada concreto.
Ambos vienen de mundos tan distintos, pero por una sonrisa son capaces de compartir una noche.
Sólo una mirada. Ni siquiera un intercambio de palabras, pero la nube desapareció en la mente de ella, y los miedos del corazón de él.
Es difícil comprender cómo las cosas pasan, pero... a veces es mejor ni siquiera preguntarse.
Él sintió el aroma de ella, sintió la piel suave, esos besos le hicieron estremecer y esas manos que no sabían bien dónde dirigirse le produjeron algo inexplicable. ¿Ternura? ¿Respeto? ¿Por qué no fue como las demás?
Ella sintió su piel, sus caricias, sus labios dulces y sus besos suaves llenos de sentimiento.
Extraños conociéndose a través de la sombra, a través del lado oscuro de la humanidad. Escondiéndose en la noche, escondiendo sus sentimientos...
¿Podría algo detenerlos?
Es incomprendible que un desconocido que se esconde contigo en la oscuridad pueda decirte no dejes de creer en esto, ¿Creer en qué? ¿En un encuentro casual? ¿En un roce secreto?
¿Volveremos a vernos mañana?
Nadie sabe que pasará mañana...
Ella no dice nada concreto, por lo tanto a pesar de las miradas, de las señales, él no entiende, o prefiere no entender.
Se esperan a la misma hora, en el mismo lugar de siempre. Ella quería sentirse amada otra vez.
Por fin lo vio, y le agitó su mano tímidamente a la distancia.
¿A quién saludas?
A un extraño...
Ahí no hay nadie.
¿Y él?
No hay nadie
El chico de ojitos claros...
¿Otra vez? No hay nadie mujer, deja ya de imaginar cosas...
Al menos le sacó una sonrisa en esa noche.
Al menos ella comprendió que no es necesario pensar tanto en un por qué.
¿No eres real?
¿Qué quiéres creer tú?
No es lo que quiera creer, es lo que necesito saber...
Tú decides si hacerme real o sólo un recuerdo.
¿Qué decidirías?

1 comentario:

  1. ¿Hacerlo real o dejarlo como un recuerdo? Es una pregunta con respuesta aparentemente obvia, pero, esos pequeños detalles le dan sabor a la vida; un encuentro casual, así de apasionante tal vez valga más que acostumbrarse a las caricias y a los besos...

    Es extraño, pero me he quedado pensando en ambas posibilidades, en mi mente trato de imaginar lo que puede pasar después, y me he quedado sin palabras.

    Tu escrito me ha gusta demasiado, al grado de (como dije antes) no saber qué decir, sólo puedo felicitarte; transmitiste cada emoción y me hiciste ser parte de la historia, y no sólo eso, también es sorprendente tu capacidad narrativa, pues tantos temas los uniste perfectamente, de forma tan natural, que te mereces más que mi felicitación.

    Ojalá y más personas puedan leerte, lo vale, eres grandiosa.

    Y bueno, como no se qué decir, me robo lo que dijiste: "Es difícil comprender cómo las cosas pasan, pero... a veces es mejor ni siquiera preguntarse."

    Gracias por compartir tus pensamientos y también por lo que me dijiste.

    Saludos.
    Edoardo.

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